Chiflado marote multifóbico seguís y reificada por el vínculo Que te ata y te atiborra como vos decís, Estimada mamerta, de mi consideración (culo) Mayor: Por qué no me dejás te pregunto de joder, A este cuerpito todo forrado de células, sí yo Te lo refriego como me sale así viene de acá asimismo, de abajo te lo arrimo, aunque no rime: Atalantada y tolondra, no pechés de mí Y sabé que de las forasteras... y de los vientles... De abrazos milongueros... de jugos tales, en fin, de los encuentros... gengiviales, de las vaginas generales... de lo más cordiales, y los avances en fin, miembro musculales... en fin, nada males... poco importa cuáles. No lo diré otrosí, empero Coqueta haceme otras caritas, boquita de puchero Baldía de como decía mi amigo poeta, trasnochado Pupilo amanecer del iris, apodado De tierra adentro hay que pegarse una enjuagada, Cada tanto y demesarte las crenchas, che cortála O para qué se toma el tipo, pobre tipo Que solamente desea darte bomba, Poeta trasnochado pupilo amanecer del iris, Y amigo mío, que va y se toma, contigo Aquel histórico café a unas 3 de una mañana, Con el regio agregado de la medialuna grasa, enhiesta Reverendamente al divino pedo, no hay pues voluntad O de tí o tuya o tu Voluptuoso voluntarismo ni flancos que imperien Tus lunáticos cuencos, ni estirpe que... Vulva vuelva mis perláticas tutucas un ovillo De imperiosas (repetí imperio, ¡diantres!) suertes o que me ericen la saeta. ¡Oh! Escurridiza, te viniste más temeraria mente terca Y menudita, tornas de talluda a lo impertinente momio, y memo dando Apiltrafando la memoria, tullida como una cosa Maraña-boba; chucha-tumba; opa-corva que apelela su totó Con colorete de arreboles, tortuosas crines La acuclillan de manjar a perennidad brutal, Es claro? Ojito, No me vine loco solo, ni lo morado velo:(que lo veas) Precipicia o licua un pasmo, es una mera Forma tuya de mirar, cárdena atisbosa Sos más pancha que la mayoliva de más berreta marca, marca Día, así que... Amorochate y picatelás, rajá fuera de Borda; Me afloraste o pior, exudó una desdemonización de mí Atea; O como se dice, me exorcicé encima. Hete desbaratada y lacra, una casquivanal bruta -(Ah! De repetir veo hube la adjetival bruta, cual feroz y súcuba cajeta de mandinga)- Montaña de resquicios, vendaval enjuto O gana de escribirte con destajos, como rumios De la hierba carnicera que va vacas engulliendo, Mis versos te asesinan con crucialidades o banales, palabras de muchas veleidadades, versos empilchados y piltrafas, ballestan con asertos Y se autosacian en la hora adversa, ciertos Como el ojete quedan, aunque rimar riman. Pero más bien escribo de aburrido, Como un reloj cucú, acucúso agujas De traspaso con flecha que no pincha Apenas 1 se clava y 2, rajuña la carne Sin beber la sangrecita: amoríos de punzar Depenetramientos de vacilante dardo; Escribo con asco chiquito, pero sin dramas Son pijaduras de mosquitos y zumbidos Sobrevolables y supravalorados, como vos; Pero como un ente adbstracto, abdominal La bola que se te pasa es muy depende, Y grazna con la rispidez mayuscular del grumo, Pule la bocha y trilla la tiesa, La dura rígida roca de la tierra, esa Donde de la Humanidad Toda, asexuada cueva el pene va y sediento abreva. Ya sé que no se entiende un carajo, como una Canción redondita, un ano sucio de ricota, un Un Un Un Trilla pispa, muchachita vivaracha Cuando vas para la ría a lavar tus ropas, Enjabonala Y dale lustre que quedó, la vez de la vez Última, un poco desastrada, como una Una Una Feo y adomingado, un pelado sin gracia Adonde aposentar asientos, un dolape De la cumbia viyera, Como la hermosa, el alba de una reverberante Mierda Atómica como o como las bombas con que nos entuban Desde la Rusia blanca al Paraguay más gaucho; No es encono con o contra vos, te aclaro, porque ahora Que entendés que te mandaste una cagada Grande grande como el sol y las estrellas, Vas a empezar pues te conozco, bobina De una noche y mil noches, a pellizcarme Las pelotas con miel de lengua, tortas fritas Y milanesas de ternera a la napolitana, Con puré Y el ajo, no soporto el relajo, amiga repostera. O lo debería decir abarrotadamente y sin Lo críptico que me subsana la batata, No ves que toda toda la aborta gastronomía De mis versos alude a ti, o a nadie, eh? Reconciliémonos a la una a las dos... A las licuadas y mullidas tres; Puse recién cito la cinta magnetofónica, Con rocanrol de fondo, garchas pronunciadas Grandes sí tremendas pero pronunciadas en inglés Americano: Y el ansia de tu piel, el pasmo por lo pórfido, Por lo porno de machucarte trivial y en la tinaja Con esta tosca trilla (no, perdón, iba quilla) que se maña y se sortija, lo siento Ves nomás le yerro a las teclas que aprieto, Estoy erro en un apreto, sufriendo la morsa entre los dedos O en las falanges de la verga mota, Y me animo a decirlo así, con descaro y verba pía, Porque sé que este puto y desanhelante blog Que me acuna, abriga y amamanta, Hiirsuto y con y griega i doble Hace mucho rato y más tiempo que no lo ve mi tía, Matilde Asunta Ramona Honda Paz de la Concha, Llamada de su madre hija, La abuela Eterna Morada de la Pija o era, un momento de la Pija Morada, Siempre me confundo donde va la pija, Y su morada, Odonde se hacen gracia eterna. Pero bien no quisiera abundar y que me tomen Por un adulador canalla o sacudidor del árbol, De una u otra o muchotra chota laya, Que bastante tengo con el bosque todo, No me hago acordar, que cada vez que codo Que nombro lo selvático y la jungla de ella Vengativa se me viene abrumadoramente Toda aquella de la perfumada y fría revulsiva Entrepierna y matogroso, con quien rimé cursiva Apaciguado dificultosamente había, nunca nunca. O para parar debiera acaso si ello Lejano y escueto de quisier quisiera Hacer de tal jaez de bello, Cumplimentarme hermosa y pieria pera, Brida susurrante, tripa estérea Lapacho vega, brezo seto, herbolados tafetanes Efigie yelmo despiadado y antro, aérea Lumbre feble tinto ambo hosco de cambado, ¡Que la cuidada rima acorde no me acordé Un choto y se fue a la del orto loma Cuál paloma! O para continuar el esperpento deste Monstruo sagrado laico y un tanto acicalado Hube detener y de tentar la honesta desea, La bruz jarifa a nubia fronda leda, El pirulín turgente, el capullo avieso De primordial aplomo e ingente pomo, Para ataladrar entreverantemente embozo éste Mezcolanza y chupateta al sesgo enclenque; O como diría ¿quién? ¿qué?